1- 1984,
George Orwell, inglés, Editorial Zig-zag, Colección Viento Joven, 20° edición:
febrero de 2016, 326 páginas.
La novela,
publicada en 1949, está clasificada en el subgénero de ciencia ficción social y
política. Pertenece al mundo de las novelas anti utópicas o distópicas, pues
muestra una sociedad en degradación. Se estructura en tres partes y 26
capítulos. La primera parte consta de 8 capítulos; la segunda, de 10 capítulos
y la tercera, de 6 capítulos.
La historia está
ambientada en una época futura (en relación a su año de publicación: 1949) en
donde el mundo estaba dividido en tres grandes superpotencias: Oceanía, Eurasia
y Extasia, constantemente en guerras entre sí. Los hechos ocurren el año 1984
en Oceanía, específicamente en Londres, la capital de la región llamada Aereofranja
Uno. La sociedad de Oceanía está gobernada, dirigida y controlada por el
Partido Único, en un régimen totalitario. Dividida en tres clases: los miembros
del Partido Interno (dirigentes de alto rango que viven en lujosas mansiones
atendidos por sirvientes); los miembros del Partido Externo (constituyen la
burocracia del aparato estatal, trabajan en oficinas y reparticiones ministeriales.
Viven en forma austera y constantemente son vigilados y controlados por el
Partido) y los proletarios (gente común y corriente, la mayoría de la población
quienes viven en la pobreza y la ignorancia en los sectores marginales de la
ciudad).
El Partido
Único, basado en la ideología del INGSOC (Socialismo inglés), cuyo líder es “El
Gran Hermano”, gobierna, dirige y controla la vida de todos los habitantes del
país a través de la policía del pensamiento y de telepantallas ubicadas en
lugares públicos, en los trabajos y en las viviendas. En el régimen han sido
abolidas ideas como la libertad, la igualdad y la justicia, lo mismo la
propiedad privada, la idea tradicional de familia, la expresión del amor y los
afectos. El sexo por placer se considera un crimen, sólo se puede practicar
para procrear, sin amor y sin afectos. Los niños se convierten en espías al
servicio del partido, incluso pueden- y lo hacen- denunciar a sus propios
padres si tienen actitudes, palabras o pensamientos contrarios al partido.
Otra manera de
control que posee el partido es la creación de la neolengua: una forma de
hablar que con el tiempo reemplazará al inglés estándar. La idea es utilizar un
lenguaje con muy pocas palabras, las precisas y necesarias para la
comunicación, que contengan significados únicos. ´De esa manera se va
reduciendo el rango de pensamiento y las posibilidades del “crimental” (crimen
del pensamiento) son menos, así se evita posibles rebeliones y se asegura la
continuidad del sistema.
La historia se
puede sintetizar en sus tres partes de la siguiente manera:
Primera parte:
Winston Smith,
el protagonista, es un miembro del partido externo y funcionario del Ministerio
de la Verdad. Trabaja en el Departamento de Registros y su tarea consiste en
“rectificar” los “errores” de la prensa escrita, pues se entiende que el
partido nunca se equivoca, siempre tiene la razón y es portador de la verdad.
Smith, consciente de que todo es una mentira, secretamente odia al partido y se
rebela a través de la duda y de pensamientos contrarios al régimen, del
recuerdo del pasado, especialmente su infancia, y de actos prohibidos como
comprar y escribir en un diario sus pensamientos, deambular por los barrios de
los proletarios, conversar con personas mayores para saber si el pasado es como
lo cuenta la historia oficial, comprar objetos que no tienen una utilidad
práctica, etc. Íntimamente, alberga la esperanza de un cambio y cree que ese
cambio surgirá de los proletarios. En todo este proceso de cuestionamiento y
búsqueda hay una mujer, también funcionaria del Ministerio de la Verdad, que
aparentemente lo espía y él piensa que pude ser un miembro de la temida policía
del pensamiento.
Segunda parte:
Trata de la historia de amor del protagonista
con Julia. La supuesta espía no lo era. Sólo es una joven que aparenta ser una
ferviente seguidora de la ideología del partido, de hecho, pertenece a la Liga
Juvenil Anti-Sexo, pero secretamente, al igual que el protagonista, odia todo lo que tenga
que ver con el partido y sus actividades. Ambos están conscientes de los
peligros que los acechan, pero entienden también que su relación es una forma
de rebelión. Tienen encuentros furtivos y a escondidas. Por un tiempo alquilan
la habitación superior del dueño de una tienda de antigüedades en donde, creen,
pueden expresar libremente su amor. Durante ese tiempo son enrolados por
O’Brien, un dirigente del partido interno, para participar en “La Hermandad”,
organización secreta que fragua una conspiración, liderada por Goldstein, el
supuesto archienemigo del Gran Hermano.
Tercera Parte:
Se podría titular
como la caída. A los amantes se les revela la verdad: siempre habían estado
vigilados. En la habitación había una telepantalla, la invitación a participar
de la conspiración era una trampa. Son apresados, encarcelados y torturados.
Los apremios físicos y sicológicos están centrados en Winston, quien, en un
principio, acepta que el partido puede controlar la mente, pero no los
sentimientos. Sometido a la mayor tortura física y sicológica que se pueda imaginar,
la utilización de las fobias, su miedo incontrolable a las ratas, termina
renegando del amor a Julia. Finalmente la “reeducación” y la “purificación” se
han logrado. En su interior no queda nada, sólo un amor incondicional al “Gran
Hermano”.
Apéndice:
Contiene una explicación detallada de la
neolengua.